En el marco del sorteo de la fase de grupos de la Copa América 2024, se presentó al público a “Capitán”, la majestuosa águila que será la mascota oficial del torneo.
Esta imponente ave, con su plumaje azul, pico amarillo y cabeza roja, representa la libertad, la pasión y el espíritu indomable que caracteriza a las diez selecciones participantes.
¡Capitán es el águila que sobrevolará la Copa América 2024 con 20BET!
Detalles del diseño
La aparecía es de un ave roja con cuerpo antropomórfico y su uniforme, aquí sus detalles y significado:
- Plumaje azul: El color azul simboliza el cielo, la libertad y la esperanza.
- Pico amarillo: El pico amarillo representa el sol, la energía y la vitalidad.
- Cabeza roja: La cabeza roja representa la pasión, el coraje y la determinación.
- Uniforme: Capitán viste un uniforme oficial de la Copa América 2024, con el logo del torneo en el pecho.
- Balón de fútbol: Capitán siempre lleva consigo un balón de fútbol, símbolo de su pasión por el deporte.
Más que una simple mascota
Capitán no es solo un símbolo del torneo, sino también un puente entre la rica cultura sudamericana y la vibrante atmósfera estadounidense, ya que la mascota es hija de madre latina y padre americano. Esta fusión cultural se refleja en su diseño, que combina elementos tradicionales de las culturas precolombinas con detalles modernos y deportivos.
Símbolos que representa la mascota
- Fuerza y poder: En diversas culturas precolombinas, el águila era vista como un símbolo de poder y majestuosidad. Los aztecas, por ejemplo, la asociaban con el dios Huitzilopochtli, mientras que los incas la consideraban un mensajero de los dioses.
- Sabiduría y visión: Las águilas también se asociaban con la sabiduría y la visión, debido a su capacidad para ver desde grandes distancias. En la cultura maya, por ejemplo, el águila era un símbolo del conocimiento y la iluminación.
- Espiritualidad: En algunas culturas, el águila era vista como un ser espiritual que podía conectar el mundo terrenal con el mundo celestial. Los chamanes a menudo usaban plumas de águila en sus rituales.
Un mensaje de unidad y celebración
La elección del águila como mascota no es casual. En diversas culturas de América, esta ave representa la fuerza, la audacia y la excelencia, valores que se alinean perfectamente con el espíritu de la Copa América. Además, Capitán nos invita a celebrar la diversidad cultural del continente y la pasión compartida por el fútbol.
Mascotas que ha tenido la Copa América
En total han sido 14 mascotas que ha tenido, solo en la Copa del Centenario 2016 celebrado en Estados Unidos no hubo mascota oficial, está es una lista.
1987: Gardelito, el pionero del tango
La Copa América 1987 marcó el debut de las mascotas oficiales, y Argentina no podía tener un mejor representante que Gardelito, una versión infantil del legendario cantante de tango, Carlos Gardel. Con su boina inclinada y su sonrisa pícara, Gardelito cautivó a los fanáticos con su encanto porteño y su pasión por la música y el fútbol.
1989: Tico, el sabio del fútbol
En Brasil 1989, el turno de ser mascota le llegó a Tico, un alegre sabiá vestido con el uniforme de la selección brasileña. Este pequeño pájaro, conocido por su canto melodioso, se convirtió en un símbolo de la alegría y la musicalidad del país. Tico no solo animaba a los equipos con su canto, sino que también demostraba su destreza con el balón, demostrando que la pasión por el fútbol no tiene límites.
1991: Guaso, el huaso chileno
La Copa América 1991 en Chile tuvo como mascota a Guaso, un dibujo estilizado de un huaso chileno, figura emblemática de la cultura rural del país. Con su sombrero de paja, su poncho y sus espuelas, Guaso representaba la tradición y el espíritu gaucho del pueblo chileno. Su presencia en el torneo contagió a los fanáticos de un sentimiento de orgullo y arraigo por sus raíces.
1993: Choclito, el maíz dorado de Ecuador
Ecuador 1993 presentó a Choclito, un simpático choclo o maíz con los colores de la bandera ecuatoriana. Esta elección no solo honraba un alimento fundamental en la dieta del país, sino que también simbolizaba la riqueza cultural y la diversidad del Ecuador. Choclito, con su sonrisa radiante y su entusiasmo contagioso, se convirtió en un embajador de la alegría y la hospitalidad del pueblo ecuatoriano.
1995: Torito Pepe, el símbolo de la garra uruguaya
En Uruguay 1995, la mascota oficial fue Torito Pepe, un imponente toro con el uniforme de la selección uruguaya. El toro, un animal emblemático de la ganadería del país, representaba la fuerza, la determinación y el espíritu luchador del pueblo uruguayo. Torito Pepe, con su mirada desafiante y su actitud imponente, se convirtió en un símbolo de la garra charrúa que caracteriza al fútbol uruguayo.
1997: Tatú, el armadillo boliviano
Bolivia 1997 tuvo como mascota a Tatú, un adorable armadillo que vestía el uniforme de la selección boliviana bajo su caparazón. Este pequeño mamífero, símbolo de la fauna boliviana, representaba la resistencia, la tenacidad y la capacidad de adaptación del pueblo boliviano. Tatú, con su sonrisa tímida y su mirada curiosa, cautivó a los fanáticos con su encanto natural y su espíritu aventurero.
1999: Taguá, el pecarí defensor del Paraguay
En Paraguay 1999 presentó a Taguá, un pecarí chaqueño con los colores de la bandera paraguaya bebiendo tereré, una bebida tradicional del país. La elección de este animal, en peligro de extinción, buscaba crear conciencia sobre la importancia de la conservación del medio ambiente. Taguá, con su actitud tranquila y su mirada serena, representaba la nobleza y el espíritu protector del pueblo paraguayo.
2001: Amériko, el extraterrestre futbolero
Colombia 2001 rompió el molde con Amériko, un extraterrestre de color turquesa con ojos azules. Su nombre, proveniente de la traducción de «América» al esperanto, simbolizaba la unión de los pueblos del continente. Amériko, con su sonrisa traviesa y su entusiasmo desbordante, representaba la alegría y la creatividad del fútbol colombiano.
2004: Chasqui, el mensajero del fútbol peruano
Perú 2004 tuvo como mascota a Chasqui, un dibujo animado de un chasqui, figura que fungía de mensajero personal del Inca. Vestido con atuendos tradicionales incas y con un balón de fútbol en sus manos, Chasqui representaba la rica historia y cultura del Perú. Su presencia en el torneo evocaba la velocidad, la resistencia y la capacidad de comunicación del pueblo incaico, valores que se reflejaban en el fútbol peruano.
2007: Guaky, la guacamaya multicolor de Venezuela
Venezuela 2007 presentó a Guaky, una guacamaya bandera con la bandera de Venezuela estampada en sus dos alas y vestida con la camiseta de la selección venezolana. Esta colorida ave, símbolo de la fauna venezolana, representaba la alegría, la belleza y la diversidad del país. Guaky, con su canto exuberante y su vuelo majestuoso, contagió a los fanáticos de un sentimiento de orgullo y pasión por su nación.
2011: Tangolero, el ñandú bailarín de Argentina
Para Argentina 2011 se tuvo como mascota a Tangolero, un ñandú vestido con el uniforme de la selección argentina. Su nombre, una mezcla entre «tango» y «golero» o guardameta, hacía referencia a dos pasiones argentinas: el baile y el fútbol. Tangolero, con su andar elegante y su mirada pícara, representaba la astucia, la garra y la pasión del fútbol argentino.
2015: Zincha, el zorro hincha de Chile
Chile 2015 presentó a Zincha, un zorro culpeo representado en origami. Su nombre, un cruce entre «zorro» e «hincha», simbolizaba la astucia y la pasión de los fanáticos chilenos. Zincha, con su diseño original y su actitud juguetona, se convirtió en un símbolo del ingenio y la creatividad del pueblo chileno.
2019: Ziziro, el capibara gigante de Brasil
Brasil 2019 presentó a Ziziro, un capibara, el roedor más grande del mundo y nativo de la Amazonía. Vestido con una camisa con el logotipo del torneo, Ziziro representaba la grandeza, la fuerza y la biodiversidad de Brasil. Su presencia en el torneo generó conciencia sobre la importancia de la conservación del medio ambiente y la protección de las especies en peligro de extinción.
2021: Pibe, el perro juguetón de Brasil
Brasil 2021 tuvo como mascota a Pibe, un perro que vestía una camisa con el logotipo del torneo. Este simpático animal representaba la alegría, la fidelidad y el espíritu juguetón del fútbol brasileño. Pibe, con su mirada traviesa y su cola que no paraba de menear, se convirtió en un símbolo del amor y la pasión que los brasileños sienten por este deporte.
Conclusión
La presencia de Capitán en la Copa América 2024 nos recuerda el poder del deporte para unir a las personas y celebrar la diversidad. Su espíritu indomable y su pasión por el fútbol nos inspiran a perseguir nuestros sueños y dar lo mejor de nosotros mismos.
Más allá de ser la mascota oficial de la Copa América 2024, Capitán tiene el potencial de convertirse en un ícono para las nuevas generaciones de fanáticos del fútbol en América. Su mensaje de unidad, pasión y deportividad es un faro de esperanza en un mundo que necesita cada vez más de estos valores.